¿Podemos soldar aluminio con el método del láser?
Resumen:
La soldadura de aluminio es un proceso que, realizado con los métodos de soldadura tradicionales (TIG y MIG entre otros) es bastante difícil de llevar a cabo. Hay varios materiales que sin experiencia previa es complicado soldar. Y esto pasa con materiales como el aluminio. En un principio puede parecer que este material es más fácil que otros metálicos. Pero no es cierto, para soldar este material se necesita una gran precisión para conseguir una unión solida entre ambas piezas.
Pero esto cambia con la SOLDADURA LÁSER. El equipo de soldadura láser de LaserComercial LC-WELD permite soldar todos los metales con una precisión y resistencia asombrosas. Todo esto sin requerir una gran experiencia previa puesto que es muy fácil de usar.
Esta técnica por rayo láser es la última innovación en soldadura. Vamos a conocer al detalle porque la soldadura láser es adecuada y recomendada para soldar aluminio fácilmente.
Complicaciones de soldar aluminio con otros métodos distintos al láser
El uso del aluminio para la fabricación de diversos productos es muy común en varias industrias. El aluminio está aislado por una capa oxidada y resistente.
Este material es muy sensible a la suciedad, y es difícil de soldar porque tiende a provocar burbujas y a perder resistencia cuando se sobrecalienta. También es un material difícil de soldar adecuadamente debido a su altísima conductividad térmica y a su bajo punto de fusión, que lo hace fácilmente deformable. Algunos métodos de soldadura generan mucho calor, lo que puede deformar rápidamente el material de aluminio y el producto. El aluminio está cubierto por una película de óxido, lo que crea dificultades adicionales de procesamiento porque la película de óxido se funde a temperaturas diferentes a las del propio aluminio. Las posibilidades y tecnologías para soldar aluminio son muy limitadas en comparación con otros materiales.
Por otro lado, la soldadura de aluminio implica trabajar con diferentes tipos de espesores, por lo que los soldadores deben saber cómo trabajar con cada uno de ellos.
La Soldadura láser aplicada en el aluminio
La soldadura láser es un proceso más rápido y sencillo que otras técnicas de soldadura. Estos equipos pueden producir soldaduras estrechas y concretas, pero con mucha profundidad, penetra menos calor en el material, por lo que no se produce ninguna deformación. Los niveles de potencia como 1500 W y 2000 W permiten mayor profundidad en nuestras soldaduras y adquirir una soldadura de ojo de cerradura estable.
Otro factor que convence a muchos usuarios respecto la soldadura láser es la velocidad a la que podemos trabajar. Con la soldadura láser, el soldador decide a qué velocidad trabajar y configura la máquina para adecuarse a su velocidad.
Con esta técnica de soldadura, no necesitamos pulir posteriormente y no deja marcas de soldadura. La LC-WELD puede elegir trabajar con aportación de material o sin ella, dependiendo del acabado y soldadura que queramos conseguir. El aporte de material en soldadura láser puede ser muy adecuado para reducir el agrietamiento que se produciría en algunos espesores de las placas de aluminio.
En resumen, las máquinas de soldadura láser permiten una aportación de calor mínima sobre el material, cordón de soldadura muy concreto y de poca amplitud, velocidades elevadas y mucha profundidad si se requiere.
Los soldadores láser también pueden soldar correctamente otros materiales como el acero inoxidable, el acero al carbono, el acero galvanizado, el titanio y el latón. Se trata de máquinas extremadamente versátiles que pueden facilitar el trabajo en muchos campos y sectores.
Beneficios de la LC-WELD frente a los métodos tradicionales:
Las soldadoras láser, como ya hemos mencionado anteriormente, tienen muchas ventajas para conseguir buenos resultados en cada trabajo. Es una aplicación de la tecnología láser que está ganando popularidad, principalmente porque nos ofrece numerosas ventajas para conseguir mejores soldaduras y resistentes estructuras. Podemos realizar soldaduras precisas y con gran profundidad si se desea, todo sin perder resistencia y calidad en la soldadura. Vamos a conocer al detalle qué nos ofrece la soldadura láser.
Ahorra tiempo y costes. La soldadura láser permite reducir el proceso de pulido posterior, evitando así costes extras y tiempo. Además, los equipos de soldadura láser tienen una larga vida útil y pocos consumibles.
Menos experiencia y facilidad de operación. Otra característica de las máquinas de soldadura láser es que la persona soldadora que utiliza la máquina no requiere una gran destreza, es decir, que es una técnica que se puede aprender más rápido que otras.
Soldaduras rápidas, misma calidad. La soldadura láser permite soldaduras rápidas de materiales distintos sin perder nada de calidad. El resultado es muy satisfactorio y se obtienen soldaduras resistentes, limpias, estéticas y duraderas.
Versatilidad. Con una misma máquina láser podemos soldar distintos tipos de materiales con facilidad: aluminio, cobre, aceros, plásticos, entre otras opciones. De la misma forma, podemos elegir si soldar con o sin aportación de material.